Cultura Japón

#Cultura | Shôgi, el ajedrez japonés

Escrito por Pablo Millan

Hola a todos, como siempre espero hayan tenido un excelente fin de semana, ya comenzamos mayo, el día de ayer se celebró el día del niño en Japón y en unos días podremos hacer lo mismo en la Asociación Mexico-Japonesa, además de que tendremos exposiciones y conciertos muy buenos en este mes. El día de hoy me gustaría hablarles sobre un juego de mesa japonés, el año pasado les hablé sobre el , un juego de origen chino que es muy popular en Japón y que de ahí se extendió por todo el mundo al terminar la segunda guerra mundial, pues hoy les hablaré sobre un juego de mesa que si bien no se ha popularizado en occidente, es todo un reto para los amantes de los juegos de estrategia.

El Shôgi (将棋), o mejor conocido en occidente como ajedrez japonés, es un juego de mesa que simula el ataque entre 2 ejercitos con igualdad de efectivos y artillería, en el cual el objetivo es capturar al rey enemigo. El shôgi tiene su origen muy probablemente en el budismo y su largo camino que hizo desde la India hasta Japón, en la India se creo el primer ajedrez del mundo, el cual se conoce actualmente como Chaturanga, el cual difiere muy poco en el ajedrez internacional que conocemos al cambiar los alfiles por “elefantes” que se mueven sólo hacia adelante 3 casillas sin saltar piezas y el tablero sólo son lineas, sin los cuadros blanco y negro que conocemos. El chaturanga al llegar a china junto con los primeros monjes budistas, se transformó en Xianqui, o ajedrez chino, el cual compite un ejercito rojo contra uno negro, disminuye el número de peones a sólo 5, incluyó las piezas de los generales en vez de la reina y las piezas en vez de jugar dentro de los cuadros del tablero lo hacen en las intercepciones, donde hay un “castillo” del cual no puede salir el rey”.

El tablero de 9×9 del shôgi lo hace bastante complejo, tanto así que apenas hace 8 años se logró programar una computadora para que venciera a un campeón mundial.

Cuando el budismo llega a Japón al rededor del siglo V o VI, este trae muchas expresiones culturales de china que formaron al Japón tradicional, como instrumentos musicales, gastronomía, ciencia, escritura y juguetes. Los japoneses siempre han tenido un espíritu de adaptación, y tomaron el xianqui y lo modificaron nuevamente, regresando la característica de jugar dentro de las casillas del tablero, pero ellos ampliaron el tablero de 8×8 a uno de 9×9, por lo que ahora se tendría 3 peones en una primera fila, luego tendríamos la artillería, el alfil y la torre en una segunda fila, y hasta atrás el rey con sus generales, caballería y lanceros. Otra característica del shôgi es que todas las piezas son iguales, con la única diferencia de que el rey “negro” tiene un pequeño punto sobre el kanji para diferenciarlo, y el resto de las piezas se reconocerán por su posición, ya que las fichas poseen un triangulo que siempre apunta al enemigo. La igualdad de las piezas se debe a que a diferencia del ajedrez internacional y sus demás parientes, en el shôgi cuando se captura una pieza esta no se saca del juego, si no que pasa a formar parte del ejercito y se puede usar contra el enemigo colocándola en cualquier parte del tablero (a excepción del peón, sólo puede haber un peón por columna).

Los movimientos de las piezas son bastante sencillos, muy pocas piezas tienen libertad de movimiento como las piezas del ajedrez internacional, y cabe destacar que a diferencia de este, en el shôgi siempre empiezan las piezas “negras”. lo más sencillo es comenzar por el peón (歩), este se mueve como el peón internacional, con la diferencia de que no existe el doble movimiento del principio, y que no captura las piezas en diagonal, si no al tenerlas enfrente. Luego está el rey (王), al igual que el rey internacional, se mueve 1 casilla a donde él quiera, después está la torre (飛) y el alfil (角), se mueven igual que en el ajedrez internacional, sin límite arriba-abajo-izquierda-derecha y sin límite diagonal correspondientemente. Ahora aquí empiezan las diferencias, los caballos (桂) se mueven igual que el caballo internacional, pero sólo hacia adelante, no puede retroceder ni ir a los lados. Luego tenemos a los lanceros (桂), ellos tienen un movimiento sin límite pero sólo hacia adelante y no pueden retroceder o ir a los lados. Las últimas 2 piezas son el general de plata (銀) y el general de oro (金), el de plata puede moverse 1 casilla a donde quiera excepto atrás, izquierda y derecha, y el de oro puede moverse 1 casilla a donde quiera con excepción de diagonales de atrás, este movimiento es muy importante y ya verán porque.

Esta es la formación inicial del shôgi, el pequeño punto junto al kanji del rey (王) indica que es el ejercito “negro” y que comenzará el juego con su movimiento.

En el tablero de shôgi hay 4 puntos en el centro, los cuales marcan la zona neutra del tablero, cuando llegas a cualquiera de las 3 filas que conforman el área de tu contrincante tienes la opción de promocionar tu pieza (como la coronación de las damas inglesas o cuando conviertes a tu peón en una pieza más fuerte en el ajedrez internacional), la cual le dará mayores habilidades a tus piezas. Cuando promocionas una pieza, esta se voltea y revela otro kanji de color rojo para saber que puedes mover de manera diferente, el peón (), el caballo (), el lancero () y el general de plata () al ser promocionados obtienen el mismo movimiento que el general de oro, este último no tiene promoción al igual que el rey. y la torre () y el alfil () conservan su movimiento normal obtienen la habilidad de moverse 1 cuadro hacia los lados que no podían antes, osea, la torre ahora puede moverse 1 cuadro de manera diagonal y el alfil se puede mover 1 casilla de manera horizontal o vertical. Todas las piezas capturadas que se usen, aunque hayan sido capturadas en su forma promocionada serán jugadas como piezas normales, las cuales se podrán volver a promocionar si entran en el territorio enemigo y su nuevo poseedor lo cree conveniente.

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Las piezas promocionadas (en rojo) sobre sus iguales sin promocionar, esta característica y el poder regresar al tablero piezas capturadas hacen del shôgi todo un reto intelectual.

En México el juego se llegó a conocer un poco el juego por el anime Ranma½, ya que el papá del protagonista masculino/femenino (si no entienden el porque de la diagonal, deben ver el anime) Ranma, Genma Saotome (el panda de la imagen), y el papá de la protagonista femenina Akane, Soun Tendo, jugaban este juego cuando platicaban sobre el compromiso de sus hijos. Si quieres aprender a jugarlo, te recomiendo visitar el CELE de la UNAM en Ciudad Universitaria los viernes a la 1pm en el salón 113 del edifcio A, ya que el profesor Shoki Goto Takashima da un taller abierto a todo el interesado en aprender, así mismo existe el grupo en formación Shogi México, donde enseñan y realizan torneos. Como puedes ver, es un juego bastante complejo, donde debes hacer elecciones (promocionar o no), cuidar tus piezas para que no sean usadas en tu contra, y engañar a tu contrario para que caiga en una trampa que provoque el jaque mate.

Genma Saotome (el panda) y Soun Tenma jugando Shôgi en el washintsu de la casa Tenma.

Genma Saotome (el panda) y Soun Tendo jugando Shôgi en el washintsu de la casa Tendo.

Sobre el autor

Pablo Millan

Redactor Sección Japón / Community Manager / Prensa

Egresado de Relaciones Internacionales por parte de la UNAM, apasionado de la cultura japonesa. Estudió japonés durante 5 años en la escuela de idiomas de la Asociación México-japonesa Kaikan y el CEI de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán. Ha participado en simposios sobre origami, ikebana, ceremonia del té, cerámica japonesa, ukiyo-e, sumi-e, confección de kimono, cocina japonesa y juegos de mesa japoneses en la UNAM, el Kaikan y el Museo Nacional de las Culturas. Promotor de la cultura japonesa en México siempre busca documentar las exposiciones en museos y galerías de artistas japoneses y de festivales culturales.

Gusta de la música rock en todos los idiomas, sus bandas japonesas favoritas son The Pillows, Asian Kung Fu Generation, Tokyo Ska Paradise Orchesta y Plastic Tree. Un lector empedernido que disfruta de novelas de Haruki Murakami, Anne Rice, Herman Hesse y George Orwells. Practica el arte marcial japonesa Aikidô y ostenta el titulo de 5 kyû con cinta verde. Gusta de las finas artes como la pintura, el teatro, la orquesta y la poesía, al igual que los videojuegos, las comedias televisivas, el anime, la caricatura estadounidense y el cine.

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