Hola todos, esperamos estén teniendo una excelente mitad de semana. Hace un par de día pudimos asistir a un evento muy interesante en el corazón de la colonia Condesa en la Ciudad de México, donde nos pudimos acercar a una de las expresiones artísticas más enigmáticas del Japón, la danza butoh.
La cita fue en El Círculo Teatral, un escenario ubicado en la calle de Veracruz #87 en la colonia Condesa a unos metros del Parque España, y todo con un sólo motivo, recordar a Ko Murobushi; él fue uno de los grandes representantes de la danza butoh a nivel mundial, y a pesar de que tuvo la oportunidad de viajar por todo el mundo mostrando su arte, siempre tuvo un cariño muy especial para México. El pasado 18 de Junio del presente año falleció en la Ciudad de México, lugar donde se encontraba desde el año pasado debido a una serie de presentaciones y talleres que estuvo impartiendo, su fallecimiento dejó un hueco en la escena de la danza internacional, más dejó un legado enorme para el mundo, siendo cada día más común ver presentaciones de esta disciplina en nuestra ciudad.
El homenaje mostrado el Lunes pasado constó en una serie de fotografías tomadas durante una de sus tantas presentaciones en México tomadas por Alfredo Millan, las cuales capturan al danzante en las múltiples posiciones que adopta el butoh, mostrando distintos sentimientos de dolor y sufrimiento, mostrando un lado humano que a veces queremos olvidar pero es latente.
Posteriormente se pudo disfrutar de una muestra de danza japonesa, la cual se abrió con una ceremonia budista en donde todos los asistentes pudieron encender una vara de incienso en honor al artista fallecido. En la muestra pudimos ver tanto danza tradicional japonesa que nos llevó al Japón feudal de las geisha y samurai, hasta la época de posguerra donde la caída de las bombas atómicas han cambiado al hombre para siempre, emociones que sólo la danza butoh puede representar.
Fue una velada bastante agradable y emotiva, donde uno se pudo sentir más cerca del lejano país del sol naciente, y sólo podemos quedar con la esperanza de que haya más eventos así en el futuro.