Ya hemos vivido tantos workshops, sin embargo hay pocos que nos han llevado de las carcajadas, la adrenalina a las lágrimas, y en esta ocasión Hyojin Choi y Jay Kim hicieron que los asistentes del Hwaiting Working Vol. 1 vivieran un día completo de mil emociones.
La mañana comenzaba y más de 100 personas esperaban por Hyojin Choi y Jay Kim, coreógrafos y bailarines codiciados en Corea del Sur, debido a sus colaboraciones en estudios como 1 Million Dance y con estrellas de la talla de Jay Park.
Fue un evento corto, y los momentos pasaban. Comenzaba la primera clase y Hyojin demostraba su fuerza y sensualidad bailando Sorry Not Sorry de Demi Lovato. Con un particular sentido del humor, picardia y un carisma irresistible conquistó a los alumnos quienes realmente disfrutaron el estilo y la versatilidad de su trabajo.
Jay Kim entraba en la segunda clase, y los alumnos ya esperaban con ansias aprender de un profesor tan experimentado como él, que con tan sólo 25 años ha logrado colocarse en el top de los coreógrafos en Corea. Su silueta elegante y llegó al recinto para impartir un estilo que a todos les encantó: Michael Jackson Style. Y fue así, que con “In the Closet” de Michael Jackson. Una clase llena de diversión y energía.
El tiempo pasaba y durante el descanso algunos de los chicos pudieron tomarse fotos y recibir el autográfo de los chicos.
La siguientes sesiones de baile serían una experiencia de conexión entre los coreógrafos y los estudiantes del curso. Hyojn comenzó con un montaje llenó de fuerza, precisión y freestyle, pues con Pie de Future invitó a todos los asistentes a descubrir lo poderosos que pueden ser.
La última clase no tuvo comparación, Jay comentaba personalmente su decisión de abandonar 1M y comenzar a buscarse a sí mismo como artista. Las emociones que transmitió, la forma en que contagió a los alumnos y el sentimiento que conmovió a todos llenó la atmósfera, al interpretar Lego House de Ed Sheeran.
Realmente este workshop superó las expectativas, llevó todos a encontrar una nueva forma de disfrutar la danza y por supuesto, nos dejó con enormes ganas de saber qué nos esperará en la siguiente edición.