Nos despedimos del año hablando de una heroína que fue creada en los años 70 y fue pauta para inspirar a las chicas mágicas que le sucedieron.
Honey Kisaragi vivía una vida normal hasta que su padre es asesinado por la organización terrorista Panther Claw, es cuando descubre que es un androide con grandes capacidades, y con la ayuda de la familia Hayami, planea detenerlos bajo la identidad de la Guerrera del Amor, Cutie Honey.
Ella vivió bajo la apariencia de una chica de 16 años, cabellera rubia y ojos azules vistiendo un vestido blanco con accesorios con elementos de corazones, pero ahora puede cambiar a la heroína de cabellera corta rosa-rojizo que viste un atuendo de batalla bastante justo de pantalón negro, top rojo con un corte de corazón a la altura del pecho, una diadema rosa junto a botas y guantes amarillos.
Su vestimenta puede variar mínimamente dependiendo la entrega de la franquicia en la que cambia un poco la historia pero nos deja muy en claro que es una robot con fuerza descomunal, un alma humana, de una personalidad despreocupada, amistosa y bromista haciendola una chica popular. A la hora de combatir saca a flote su lado agresivo, inteligente y sexy.
Su habilidad de transformación se activa mientras toca su gargantilla y dice el comando “¡Honey Flash!”, que también le permite cambiar su apariencia a la profesión que desee: Enfermera, Motociclista, Asistente de dirección, etc. todo esto para poder infiltrarse y obtener más información.
De tal manera nos enfocaremos en su atuendo principal como Cutie Honey, usando en la parte baja unos pantalones negros que pueden ser desde los jeans hasta unos leggins pesqueros que te darán un aire más fresco si es que vives en un clima cálido.
Mientras en la parte superior se recomienza una playera roja, tendrá puntos extras si tiene estampados de corazones, algún corte de escote o algún pliegue decorativo a la altura del pecho. Se puede variar de una forma casual al usar una camisa roja abierta que cubra una playera blanca o amarilla.
De calzado se recomiendan botas altas ya sean amarillas, de algún color café muy claro o amarillento como lo son los tonos miel, camello o mostaza, así como cambiarlos a blancos. Si no tienes facilidad de alguna de estos colores puedes acudir al infalible negro.
Para terminar de complementar el atuendo es bueno mezclar mascadas, bufandas y guantes amarillos, junto con brazaletes, collares, anillos o bolsos con detalles de corazón y espadas, como su arma principal. Ó simplemente accesorios en rojo, pero procura no dejar del lado la gargantilla que es fuente de su poder.
El “choker” o gargantilla es, por definición, un collar ceñido al cuello. En sus inicios en el siglo XVIII era un listón rojo que rindió homenaje a aquellos que encontraron la muerte en la guillotina, que si era negro era símbolo de ser una prostituta. Pero con el paso del tiempo fue optado por bailarinas y mujeres modernas.
Su significado cambió radicalmente cuando inspirada por la joyería de la India, Alejandra de Dinamarca, Princesa de Gales, empezó a usar gargantillas a perladas que se volvieron símbolo de élite. Actualmente lo usan distintos estatus y son hechos de diversos materiales y con variedad de colgantes que pueden dar mil y un impactos.
Así que si quieres empezar un año nuevo con una actitud desafiante, con tu corazón en una mano y la inteligencia en la otra, este estilo es para ti, es hora de ¡Honey Flash!Modelos:
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