Akiba-kei Anime Recomendación

#TokyoQuest: Slam Dunk

Escrito por Angel Garmol

La simplesa es muchas veces la clave para resolver algo. Esta frase de seguro pasó por la mente de James Naismith un día de 1891. El problema en cuestión era el desarrollar un deporte que se pudiera jugar en el interior durante el invierno, sobre todo cuando este invierno era el de Springfield, Massachussets.

La solución que tuvo era el usar pelotas para poder canalizar la energía de sus estudiantes. El objetivo era simple, hacer lanzamientos a un blanco que se pretendía fuera una caja de unos 50 cm, sin embargo, la universidad donde era profesor el buen James solo pudo conseguir canastas de melocotones.

Esta nueva practica poco a poco fue ganando adeptos y elementos se cambiaron, como el número de participantes y la canasta pasó a ser un aro de metal, que tiene integrado un tablero. Reglas se fueron añadiendo y esta idea de 1891 se le nombró Basquetbol.

Se podría decir que junto con el voleibol y el futbol forma una trinidad de actividades físicas que alguna vez hiciste en tu vida. Su popularidad ha traspasado todas las fronteras del mundo y ha impulsado ligas, películas, historias de éxito y uno que otro manga, siendo uno de estos últimos una pieza fundamental en la década de los noventa para la conquista de lo Japón en estas tierras. Y ya era justo hablar de este tema.

Esta nota va dedicada con mucho cariño a nuestra seguidora Kami, quien ha apoyado mucho a este proyecto y ha estado comentando en los After. Así que, para ti especialmente tenemos la nota de Slam Dunk.

La serie empieza con el personaje que seguiremos en todo este viaje. Hanamichi Sakuragi es un chico matón, rudo y con una muy mala suerte en el amor. Un sinfín de rompimientos lo van hundiendo, siendo la gota que derrama el vaso la respuesta de la última chica a la que se le confiesa; “Pero el chico que me gusta Oda, el pertenece al club de basquetbol.” Sakuragi le toma odio al deporte y le da su buena dosis de golpes a todo aquel que se atreva a mencionarlo en su presencia.

En sus primeros días de preparatoria Sakuragi se topa con Haruko Akagi, una chica bien que le pregunta si le gusta el basquetbol. En su desesperación por contacto femenino miente, diciendo que super le encanta y van al gimnasio. Akagi le platica todo lo que sabe del deporte y resalta una jugada de enceste que causa emoción en los espectadores y fanáticos cuando la ven. Se trata de las clavadas, o como se le conocen en idioma ingles “Slam Dunk”.

Tras una serie de sucesos, dimes y diretes conocemos a más personajes del cast. Kaede Rukawa es el ser opuesto de nuestro protagonista y toda una leyenda casi consagrada en el deporte. Su destreza es un enorme imán de seducción para espectadores y para chicas, incluso Akagi tiene un crush con él. Cómo buen shonen que se respete, es el personaje que muestra un enorme cambio de inicio a fin, pasando de un ser individual a un gran compañero de equipo.

Takenori Akagi es el hermano mayor de Haruko y es el capitán del equipo. Tiene un duelo con Sakuragi que se desarrolla de una forma muy especial. Él ve todo el potencial que tiene nuestro protagonista y lo recluta al equipo, aunque lo hace empezar desde muy abajo, poniéndolo a organizar los vestuarios y limpiar los balones, cosa que Sakuragi hace con todo su orgullo y vocación.

Más adelante tenemos la aparición de Ryota Miyagi, otro chico malo que causa muchos problemas y que hace buenas migas con el protagonista. Tiene un talento asombroso para recuperar balones en los partidos. Hisashi Mitsui es el tercer bad boy del equipo, sólo que su historia tiene que ver con las lesiones que ha sufrido y el rencor que guarda al deporte.

Otros personajes que tienen su momento de brillar más adelante en la serie son el entrenador Mitsuyoshi Anzai y Kiminobu Kogure. De verdad que tienen lo suyo estos personajes y contarlo aquí sería hacer un poco de spoiler, por lo que los usaré como mi carnada o as bajo la manga para que veas el día a día del equipo de basquetbol de la Preparatoria Shohoku.

El anime fue producido por la hoy infame casa productora TOEI Animation. El diseño de personajes se apega bien al manga, aunque se inclina un poco más a esta tendencia de meter elementos gráficos un poco más realistas, ejemplo de estos son las proporciones, musculaturas, labios o narices. Aunque también tiene sus momentos de dibujos tirando más chibis o caras graciosas, haciendo ese contraste casi extremo de seriedad con la comedia.

Para escribir esta nota volví a ver momentos clave de la trama, pues cuando miré por primera vez era un niño de primaria. Debo decir que la animación, fotografía y arte es uno muy bonito y de los que pudieron marcar con su huella la historia del anime. El guion suele extenderse un poco con diálogos y esto se ve reflejado en esas tomas largas, secuencias que se toman su tiempo y uno que otro soliloquio. Cosa que se ve compensada con unas animaciones versátiles y que tiene un detalle preciso para esos momentos de pases, canastas, fintas, robos y otras cosas que se ven en los partidos. Aquí agradezco que la serie se animara en aquellos años, pues de haber sido hoy lo más seguro es que TOEI hubiera hecho algo muy feo. (¡Joder TOEI! ¿quete pasó? Antes eras chévere)

El baloncesto tuvo su debut en la rama masculina en los juegos olímpicos de 1936, los cuales fueron organizados por el Tercer Reich y la persona menos grata que haya conocido la humanidad. Mientras que la rama femenina empezó en las justas de Montreal, celebradas en 1976.

Desde su aparición se ha visto un dominio casi absoluto por parte de los Estados Unidos en ambas ramas. La única vez que no ganaron fue porque no participaron, este hecho se le conoce como el boicot de Moscú de 1980 que surgió a raíz de la guerra fría. Pero, el momento más emblemático de Estados Unidos fue en Barcelona 1992, donde compitió el “Dream Team”; equipo que fue formado por los mejores atletas de la NBA, siendo los más conocidos hoy en día Scottie Pippen, Magic Johnson y el que posiblemente sea el jugador más popular de la old school: Michael Jordan.

Slam Dunk es una fantástica joya del anime noventero. Fue una obra que apeló más a un realismo y a un público adolescente. Recuerdo ver a mis primos mayores disfrutar la serie y luego salir a jugar imitando pases, jugadas o secuencias. Podría decir que este es uno de esos shonen que están a nada de un seinen. Lo único de lo que “peca” el anime es que no adapta toda la obra y se toma una libertad creativa para el final. Eso no quita que sea formidable el viaje del joven Sakuragi.

Ahora te toca a ti. Dinos en nuestras redes sociales tu opinión de este anime deportivo. ¿Quién es tu personaje favorito? ¿Cuál fue tu momento clímax que te emocionó? Con gusto leemos todos los mensajes. Por mi parte sería todo y nos leemos hasta el siguiente #viernesdeanime.

goals (?)

Sobre el autor

Angel Garmol