Guillermo del Toro merece ser nombrado héroe de la patria mexicana y rey absoluto de todos los otakus. Este director de cine tiene la habilidad de poder entender la esencia de todo lo que ha leído y visto, para luego traducirla en su propio idioma. Gracias a esto hemos tenido películas como Hellboy, El espinazo del diablo, El laberinto del fauno y su carta de amor a lo venido de la tierra del sol naciente llamada Pacific Rim.
Para quien no ha visto la película, he aquí un pequeño resumen: aparecen unos monstruos enormes, humanidad crea unos robots grandotes llamados Jaeger (sin el Eren) para protegerse, los monstruos poco a poco se hacen más feroces, humanidad pierde la fe en los robots enormes y mejor crean una muralla grandota, la muralla (que no se llama Maria) es destruida, entonces deciden llamar a un piloto retirado para que vuelva a subirse junto con una nueva compañera al maldito robot y así detener el tercer impac… digo, y así detener el apocalipsis.
Sip, del Toro usó muchos conceptos de manga y anime, pero planteados de tal manera que resultaran amigables para todo el mundo. La película fue todo un éxito y por mucho tiempo la gente pidió una continuación. En internet se dice que hay una cosa llamada Pacific Rim: Uprising, pero todo el mundo sabe que esa película no existe. Fue gracias a Netflix que tenemos el retorno de esta franquicia, en forma de un anime llamado Pacific rim: The Black, o para los méxicos y países que hablan español “Titanes del pacifico: tierra de nadie.”
La serie comienza con un retorno de los Kaiju que han hecho puré al continente australiano. En medio de este caos conocemos al Jaeger Hunter Vertigo, que es piloteado por el matrimonio Travis. Ante la caída inminente de la humanidad en esa porción de tierra los altos mandos dan la orden de evacuar y salir de ahí. Hunter Vertigo choca con un panorama muy complicado, pues un grupo de niños queda aun en Australia y los kaijus lo han dejado en muy mal estado. Los Travis deciden dejar en un lugar seguro a este grupo, donde están también sus hijos Hayley y Taylor, prometiendo volver con ayuda.
Pasan entonces 5 años y los hermanos han podido sobrevivir gracias al cultivo de la tierra junto con las demás personas. No todo es felicidad en este mundo, pues luego de una discusión Hayley sale de esta zona segura y encuentra un Jaeger de entrenamiento llamado Atlas Destroyer. Taylor la encuentra y deciden activar al robot, solo para darse cuenta que con esto han atraído a un kaiju peligroso.
Los hermanos ahora deberán aprender a luchar y salir de su zona segura para encontrar la respuesta de que les pasó a sus padres y descubrir otros secretos de este mundo sin esperanza, mientras luchan con monstruos enormes y otros del tamaño de humano, pues una persona que queda aun en esta tierra de nadie desea tener ese Jaeger, a cualquier precio.
El anime fue producido por Polygon Pictures, estudio enfocado al CGI. Esta tecnología fue la apuesta visual, ya que es la que mejor le dio vida a los seres colosales que vemos en pantalla, aunque esto significó sacrificar las expresiones de los personajes humanos.
La paleta de colores apuesta por manejar primero armonías y luego muchos contrastes, todo en función de que Atlas Destroyer sobresalga. El diseño de los Kaiju se luce gracias al medio y la fotografía se ve dinámica en los momentos clave de batalla. Otra cosa a resaltar son las cabinas de los Jaegers, que le rinden un digno traslado a lo visto en la única película de imagen viva de la franquicia. Y los momentos cuando los pilotos se conectan son una ejecución artística que explota lo más que puede el CGI.
Pacific Rim: the black es una serie que puede llenarte si te quedaste con ganas de más. Reconozco que parte de estereotipos en el inicio, pero poco a poco va nutriendo el universo imaginado por del Toro. Sus altibajos pueden salir a flote si no eres fanático del CGI, aunque admito que a diferencia de otros es muy pulido. Si no sabes nada de la película puede que te pierdas por momentos, pero nada que uno que otro momento de exposición o diálogo acertado no solucione. Si quieres una serie de corta duración esta opción es muy buena.
Ahora te toca a ti. Dinos en nuestras redes sociales tu opinión de esta franquicia de robots patea traseros. También puedes dejarnos tus recomendaciones para futuras notas y recuerda compartir con tus amigos. Por mi parte sería todo y nos leemos hasta el siguiente #viernesdeanime.