El terror japones es una de esas cosas que deben ser nombradas patrimonio intangible de la humanidad. Su visión del más allá y del dolor eterno nos han dado joyas narrativas. El más conocido es el maestro Junji Ito, que pudo tomar algo tan aleatorio como lo son los espirales y darnos pesadillas a todos.
Los propios fantasmas en el folklore nipón son todo un tema de estudio. En otras notas hemos visto como los representan y en el anime de hoy veremos cómo se pueden emplear en una serie que a primera vista no se ve que vaya de esto.
Mieruko Chan es la historia de una chica llamada Miko y que al igual que tú y que yo tiene una vida de lo más normal. Vive en una casa normal con su padre, su madre y su hermano. Acude a una escuela normal y tiene una amiga que es muy risueña.
La cosa toma un giro cuando un buen día lluvioso se da cuenta de algo que te provocará el efecto de hacer del baño para adentro de tu cuerpo; Miko es capaz de ver fantasmas y almas en pena. Ella decide ignorar este hecho y darle por su lado el que se esté muriendo de miedo. La cosa puede quedar ahí, pero los fantasmas son seres incomprendidos o que no tienen idea de que hacer ahora. Algunos de ellos son un peligro para las personas, sobre todo para Hana que es la mejor amiga de Miko.
Con manos y piernas temblorosas nuestra protagonista trata siempre de evitar todo contacto con las apariciones, a menos que sea inevitable o en un par de ocasiones vemos que el nuevo don de la chica ayuda a las personas.
Passione (no, no es una jojo referencia) se encargó de adaptar esta obra. La paleta de colores responde mucho como contraste a los colores de la protagonista. Los ojos amarillos de ella son el foco de atención en un par de escenas. En otros momentos de la serie vemos el uso de grises y marrones, sobre todo para representar a los espectros. Algo que parece estar tomando relevancia en esta etapa del anime es el uso de degradados, en este caso aparecen en el cabello de las protagonistas.
El diseño de los fantasmas es lo que más sobresale del anime. Algunos son meras personas que caminan como si fueran zombis y otros son mezclas de partes humanas con detalles animales y orgánicos que resultan en cosas muy atroces.
Algo que hizo mucho ruido en redes sociales sobre este anime fue su dosis de fanservice que se puede catalogar como ecchi. Para muchos es algo que está de más y que no debería ni siquiera aparecer, pues la serie no va de eso. Este punto de debate no quita el hecho de que la serie es disfrutable tanto a nivel de un horror muy ligero a casi un drama, pues Miko debe encontrar una solución a cada situación que tiene sin parecer loca o hacer sospechar a otras personas.
Ahora te toca a ti. Dinos en nuestras redes sociales cuál es tu opinión de este anime, así como dejarnos tus sugerencias. Por mi parte sería todo y nos leemos hasta el siguiente viernes de anime.
Cuando se te pasa el último camión y ahora debes aventarte el regreso a patín