Machiko Hasegawa. Mujer nacida en Japón en 1920 y que pudo ser testigo de uno de los acontecimientos históricos más negros de la humanidad conocido como la segunda guerra mundial. Luego del final de la guerra Machiko incursiona como la primera mujer mangaka de la historia y decide crear una serie que le ayude a su nación a recobrar la confianza en sí misma, mostrando a un personaje con el que la audiencia podía identificar la vida que necesitaban reconstruir. En la nota de hoy, y con lo poco que pude encontrar en idioma español, hablaremos de una figura de nicho japones que se llama Sazae-san.
Sazae-san empezó su publicación en 1946 y culminó en 1974. En sus páginas Machiko nos presentó a una familia “típica” japonesa conformada por la protagonista Sazae; una esposa y ama de casa que sigue alguna que otra norma tradicional, pero que luego sería usada por su autora para reescribir las reglas del juego. El esposo de Sazae es Masuo, un hombre que cumple su rol en esta sociedad nipona al ser un asalariado más y que hoy en día se podría considerar un cliché. Namihei y Fune son los padres de Sazae y ocupan este lugar de patriarcas dentro den hogar, pues hay que aclarar que viven todos juntos en la misma casa. Katsuo y Wakame son los hermanos pequeños de la protagonista y son polos opuestos; mientras el primero es un niño que odia hacer tarea, la segunda es toda una estudiante de honor. Tarao es el bebé de Sazae y personaje que no aparece al inicio de la serie. Por último, tenemos al gato de la casa Tama.
El anime de Sazae san comenzó a emitirse en el año de 1969 y no ha parado su transmisión. A la fecha de publicación de esta nota la serie lleva más de 8000 capítulos y eso la vuelve la serie animada más larga de la historia, dejando muy por detrás a títulos como one piece, pokemon o los Simpson.
Y una serie tan larga obvio tiene que adaptarse, más cuando se trata del slice of life supremo. Como dije al principio, Sazae buscaba aliviar y darle ánimos a un pueblo que venía de perder mucho. En sus inicios a los personajes se les dio una vestimenta típica nipona y que poco a poco fue integrando elementos que la propia sociedad japonesa iba adaptando. Puedo comparar esto como un juego de tenis: una pequeña parte de la sociedad adopta algo, Sazae responde mostrando eso y se regresa la pelota cuando casi toda la sociedad lo adopta, el ejemplo más claro es como los personajes en sus últimas apariciones salen con ropa más occidental.
La mangaka también se dio cuenta de los cambios que sufría la sociedad y adaptó tanto momentos típicos, cómo nuevas ideas. Siendo la más importante el feminismo, y es que Sazae es feminista y en varios episodios se le puede ver realizando actividades por el bienestar de las mujeres de su barrio y zona donde vive.
Esta nota es corta, muy corta y sé que no le hace justicia a esta serie. Sin embargo, decidí hablar de ella para poder incrustar la espinita de curiosidad en los lectores. Entiendo el motivo por lo que compañías no la sacaron de Japón, pero creo que ahora gracias al boom que estamos viviendo de anime se le puede dar una oportunidad. Sobre todo, para quitar varios estigmas o clichés que se tiene del país. Entiendo que es una ficción, no obstante, creo que podría balancearse bien y lograr conectar con personas que se interesan más por la cultura, lo social y la forma de vida en Japón.
Ahora te toca a ti. Cuéntanos si conoces a Sazae san. ¿Viste el anime? ¿Qué te ha gustado de la serie? Por mi parte sería todo y nos leemos hasta el siguiente viernes de anime.
Todos tenemos esa tía que le entra a jugar con los niños para imponer respeto. Y si dices que no tienes es porque tú lo eres esa tía!