Hola a todos, espero hayan tenido un excelente fin de semana. Hemos tenido bastantes actividades culturales en este mes, y se vienen otras tantas en los meses venideros, pero hoy nos detenemos un poco para hablar un poco sobre un tema que de seguro a muchos les ha de interesar.
Muchas bebidas espirituosas son símbolos de países o ciudades específicas, así tenemos el tequila en México, el champagne en Fráncia o el whisky en Escocia, pues Japón tiene el sake. Para comenzar el tema tenemos que hacer una aclaración, la palabra sake en japonés (酒) significa bebida alcoholica, así que el ordenar sake en Japón implica recibir la carta de vinos y licores en cualquier restaurante, y si se quiere disfrutar de la tradicional bebida japonesa, es nihonshu (日本酒, lo que se traduce literalmente como bebida alcohólica japonesa).
Así como hay tequileras en México, Japón tiene miles de casas destiladoras de sake.
El nihonshu tiene un origen indeterminado, algunos creen que se inventó en China durante el siglo V antes de nuestra era y fue introducido a Japón durante la gran migración cultural que se dio a la isla en el siglo VI de nuestra era, otros creen que fue un accidente japones al descuidar plantaciones de arroz que se fermentaban y cuando los cultivadores bebían del agua se dieron cuenta de su contenido alcohólico, por lo que posteriormente hicieron el procedimiento artificialmente, generando el proceso de destilado que conocemos actualmente.
El sake o nihonshu se utiliza para brindar en momentos importantes, desde celebraciones anuales hasta en funerales.
La preparación del nihonshu es en apariencia muy sencilla, ya que sólo requiere de arroz y agua, ya que la levadura utilizada para la fermentación se encuentra de manera natural en el arroz. El primer paso para producir nihonshu es la selección del arroz, un buen catador sabe que dependiendo de la región donde fue plantado y cosechado el arroz este tendrá un sabor distinto, por lo que los productores deben que ser unos gourmets del arroz para poder elegir el mejor. Posteriormente se muele el arroz, siendo otra característica que distingue a cada casa destiladora, ya que algunos optan por un molido fino, otros por uno grueso, algunos usan maquinaria moderna y otros molinos de piedra que funcionan con la energía del río local, estas decisiones modificaran el sabor del producto final. Después de esto se comienza el primer lavado del arroz, poniéndolo en grandes toneles de agua que permitan capturar las partículas flotantes y dejen sólo el arroz molido en el fondo. Terminado el lavado, se pondrá a cocer por primera vez el arroz, y el producto de la cocción se colocará al aire libre para generar un moho, este será la levadura que consumirá el azúcar del arroz y generará alcohol, después de hacer un filtrado de sedimentos, este paso se repetirá varias veces según el tipo de nihonshu que se quiera preparar.
El sake se utiliza mucho para acompañar el sushi y el sashimi, aunque también se acostumbran botanas como los edamames.
En México se puede adquirir nihonshu en cualquier vinateria y el minisuper Mikasa, pero hay que aclarar que al no ser una bebida con denominación de origen, todos esas botellas que podemos comprar son de origen estadounidense. Pero no todo está perdido para el que quiera tomar un autentico sake japonés, ya que existe un lugar en la colonia Condesa de la Ciudad de México llamado “La Sakeria”, cuya carta contiene marcas que sólo se pueden comprar en Japón y podrán probarlos tanto helados como calientes, como se debe tomar un buen sake según la temporada, te dejo el enlace al artículo donde hablamos del lugar para que te animes a ir. Y cuéntanos ¿has probado el sake?
[…] En cuanto a comida se podía encontrar una variedad enorme y para todos los gustos, pasando por los típicos tacos de bisteck para acompañar con una cerveza, al pasillos de los “yaki”, comida asada japonesa como el takoyaki, el okonomiyaki y el yakimeshi. También había cosas más “caldositas” para los que querían algo muy caliente como el udon, el oden o un tazón de curry con arroz, o si querías un poco de todo podías comprar un obentô para acompañarlo con un vaso de calpis o sake. […]
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